Padres · 11 de Jun 2020
Ahora tus hijos podrán entender la función de estos pequeños animalitos y dejar de tenerles miedo.
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¿Tu hija encontró una arañita en el baño y se fue corriendo? ¿Tu hijo vio volar a una mosca en la cocina y se desesperó? Es normal que los chicos reaccionen con miedo ante algo que no conocen, por eso, queremos ayudarte a explicarles que los insectos no son malos.
De hecho, cumplen un papel muy importante en los ecosistemas. Para saber más sobre ellos conversamos con el entomólogo Jefferi De la Cruz. ¡Presta atención!
Jefferi explica que los insectos más comunes que podemos encontrar en nuestra casa son las polillas, las cucarachas, las hormigas, las moscas caseras, las de la fruta, los mosquitos, los pececillos de plata y las tijeretas.
Él asegura que la gran mayoría de insectos son inofensivos para los humanos. Los más problemáticos son los mosquitos (o zancudos), que pueden transmitir enfermedades como el dengue. Pero después de ellos, el resto son buenos, aunque puedan ser algo molestos.
“Los insectos se han adaptado a cualquier tipo de ambiente. No es que tengan preferencia por vivir en casa, sino que más bien los pueden encontrar en todos lados”, dice.
Menciona también que algunos de ellos encuentran en nuestros hogares un lugar perfecto para tener refugio y comida. Los pececillos de plata, por ejemplo, se alimentan de fibras como el cartón o el papel.
Otros solo vienen de visita cuando se sienten atraídos por algunos olores. Como las moscas de la fruta, que aparecen cuando dejamos un plátano o una mandarina expuesta por mucho tiempo.
Los insectos son el grupo de animales más abundante del mundo. Todos ellos desempeñan varios papeles principales. Un ejemplo es la polinización: se encargan de transportar el polen de una flor hacia otra para que puedan surgir semillas y frutas.
¡Pero eso no es todo! Muchos son controladores de plagas y se alimentan de otros insectos que sí pueden causarnos problemas. Además, mantienen el suelo oxigenado y con espacios que permiten el flujo del agua, así las raíces de las plantas pueden obtener oxígeno e hidratarse sin mucho esfuerzo.
Sin olvidarnos que tienen un lugar en la cadena alimenticia: son el plato principal de animales más grandes. Sin ellos, estos desaparecerían y nosotros también.
Si no queremos toparnos tan seguido con nuestros vecinos, lo mejor que podemos hacer es mantener la casa limpia y no dejar la comida a su alcance.
Los chicos deben saber: los humanos somos los que “invadimos” los espacios naturales para urbanizarlos, así que al final, son ellos que han tenido que aprender a lidiar con nosotros.
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